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La situación actual de la salud mental en Navarra tras la pandemia, las necesidades detectadas y las propuestas para su mejora fueron las cuestiones más importantes que se trataron en la reunión que mantuvo Patxi Vera con la asociación ANASAPS, dentro del trabajo de acercamiento de la Institución a las entidades sociales.
La Asociación Navarra para la Salud Mental (ANASAPS), constituida en 1987, ha cumplido ya 35 años de vida y agrupa a más de un millar de socios, entre familiares y personas con experiencia propia.
En el encuentro, el Defensor tuvo ocasión de conocer las acciones y servicios prestados por la entidad a través de diferentes programas, como los de información y orientación, apoyo individual y grupal, asesoramiento jurídico, sensibilización y divulgación, ocio y tiempo libre. En especial, se hizo hincapié en el servicio de intervención sociocomunitaria (EISOC), que dispone de atención domiciliaria, y en el de vivienda con apoyo (Aukera).
El titular de la Institución escuchó y tomó nota de las preocupaciones y de las reivindicaciones de las personas afectadas en el ámbito de la salud mental respecto a las administraciones públicas, como la falta de formación adaptada y de protocolos específicos en las policías, la falta de regulación normativa en el terreno de las contenciones físicas y químicas, el distanciamiento en la atención desde la pandemia de Covid-19, la falta de profesionales en psiquiatría y psicología, descenso del seguimiento médico y terapéutico, así como la necesidad de cambio de modelo atencional.
En la reunión participaron, por parte de ANASAPS, su presidente, José Luis Cabero, su vicepresidente Luis Álvarez de Eulate, las vocales familiares Charo Echeverría y Lola Gutiérrez, así como su coordinadora, Aitziber Yárnoz.
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