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Resolución 203/2009, de 15 de octubre, del Defensor del Pueblo de la Comunidad Foral de Navarra, por la que se resuelve la queja formulada por don [?], en su calidad de director del Observatorio de Derechos Lingüísticos.

15 octubre 2009

Euskera

Tema: Falta de atención personal en Euskera en un centro de salud de la zona mixta

Exp: 09/628/C

: 203

Bilingüísmo

ANTECEDENTES

  1. Con fecha 17 de septiembre de 2009, tuvo entrada en esta Institución un escrito suscrito por don [?], Director de Behatokia, en el que se manifiesta una queja frente al Departamento de Salud.

    Expone que, el pasado 18 de junio, a las 16,00 horas, un ciudadano estuvo en el Centro de Salud de San Juan y que no pudo ser atendido en euskera por ninguno de los dos trabajadores que se encontraban en recepción.

  2. Examinada la queja, y a fin de poder determinar las posibilidades concretas de actuación de esta Institución, de conformidad con lo establecido en la Ley Foral 4/2000, de 3 de julio, reguladora de la misma, se solicitó informe al Departamento de Salud del Gobierno de Navarra.

    Con fecha 13 de octubre de 2009, se recibió el informe solicitado, en el que se hace constar lo siguiente:

    “El Centro de Salud de San Juan, situado en Pamplona, pertenece a la Zona Mixta, en donde el conocimiento del euskera no es preceptivo, pero se valora como requisito en las Ofertas Públicas de Empleo de los distintos estamentos que trabajan en un Centro de Salud.

    La Dirección General de Presidencia ha emprendido una serie de actuaciones con el propósito de mejorar la actuación del Gobierno en el ámbito de la participación y atención ciudadana. En este sentido, en aquellas llamadas telefónicas que se pueden recibir en las oficinas del Gobierno situadas en Pamplona y en el resto de la Zona Mixta, de interlocutores que utilizan el vascuence, para una mejor atención al ciudadano, si no es posible atender al interlocutor en la misma lengua con los medios de que se dispongan en las distintas unidades, existe un protocolo de procedimiento interno que permite que la llamada sea atendida en euskera sin necesidad de interrumpir la comunicación, redirigiendo la llamada al Negociado de Información al Público y Registro, al teléfono [?] (interno: [?]), donde será atendida”.

ANÁLISIS

  1. El Título II de la Ley Foral 15/2004, de 3 de diciembre, de la Administración de la Comunidad Foral de Navarra, que establece los derechos de los ciudadanos en relación con la Administración, al regular el derecho a la atención adecuada, dispone en su artículo 6.2 que “asimismo tiene derecho (el ciudadano) a usar tanto el castellano como el vascuence en sus relaciones con la Administración de la Comunidad Foral de Navarra, en los términos establecidos en la legislación foral navarra reguladora del uso del vascuence”.

    La Ley Foral 18/1986, de 15 de diciembre, reguladora del uso del vascuence, incorpora como objetivos calificados de “esenciales” (artículo 1) y que, por lo tanto, son los que deben asegurar todos los poderes y Administraciones públicas en Navarra, los siguientes: a) amparar el derecho de los ciudadanos a conocer y usar el vascuence y definir los instrumentos para hacerlo efectivo; b) proteger la recuperación y el desarrollo del vascuence en Navarra, señalando las medidas para el fomento de su uso.

  2. El vascuence es una lengua propia de Navarra. Así lo establece el artículo 2 de la citada Ley Foral 18/1986, que, a su vez, también instituye como objeto esencial de la propia Ley Foral (artículo 1.2.a) amparar e impulsar el derecho de los ciudadanos a conocer y usar el vascuence, así como definir los instrumentos para hacer efectivo ese derecho.
  3. El artículo 17 de la Ley Foral 18/1986, de 15 de diciembre, del uso del vascuence, reconoce el derecho de todos los ciudadanos a usar en la zona mixta tanto el vascuence como el castellano para dirigirse a las Administraciones Públicas de Navarra. Por tanto, todo ciudadano adscrito a un centro de salud sito en la zona mixta tiene legalmente derecho a dirigirse en vascuence, de forma oral o escrita, a dicho centros de salud, sin que la Administración pueda desconocer ese derecho.

    Si el funcionario o empleado que le atiende no conoce la lengua, el deber de la Administración es contar con el necesario traductor en la relación oral que se establezca. Lo que no puede hacer es negar al ciudadano su derecho a dirigirse en vascuence, pues ello conllevaría una vulneración de lo dispuesto en los artículos 1, 2 y 3 de la Ley Foral 18/1986, de 15 de diciembre.

  4. La Administración de la Comunidad Foral, en el ejercicio de su potestad de autoorganización, dispone de un amplio margen de decisión respecto a la forma y medios complementarios a implementar para hacer efectivo el derecho ciudadano a usar el vascuence en sus relaciones orales con los servicios con sede en la zona mixta. La dotación de los medios materiales y personales es una cuestión que compete decidir a la propia Administración, pero que, en todo caso, debe optar por aquellos que sean necesarios y adecuados para garantizar la efectividad del derecho de los ciudadanos a utilizar el vascuence cuando así lo decidan.

    Aunque los medios anunciados en el escrito de respuesta, en abstracto, pueden ser adecuados, lo cierto es que, en el presente caso, pretendiendo el ciudadano comunicarse en euskera con el centro de salud de San Juan, la comunicación no pudo establecerse en dicha lengua, razón por la cual se lesionó su derecho. Producida tal vulneración, no podemos sino formular el pertinente recordatorio de deberes legales.

Por todo lo anterior, de conformidad con el artículo 34.1 de la Ley Foral reguladora de la Institución

RESUELVO:

  1. Recordar al Departamento de Salud del Gobierno de Navarra su deber legal de hacer efectivo el derecho de los ciudadanos a dirigirse en vascuence a las oficinas, servicios y centros de salud ubicados en la zona mixta.

  2. Conceder un plazo de dos meses al referido Departamento para que informe sobre la aceptación de este recordatorio de deberes legales o, en su caso, de las razones que estime para no aceptarlo, con la advertencia de que, de no hacerlo así, incluiré el caso en el informe anual que dirigiré al Parlamento de Navarra, en los términos previstos en el apartado segundo del citado artículo 34 de la Ley Foral 4/2000, de 3 de julio.

  3. Notificar esta resolución al autor de la queja y al Departamento de Salud, indicándoles que contra la misma no cabe interponer recurso alguno.

El Defensor del Pueblo de Navarra

Francisco Javier Enériz Olaechea

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